Mafalda y el palito de "abollar" ideologías
Mafalda nos enseñó muchas cosas, nos mostró algunas palabras que no conocíamos: ideología, censura, despotismo. Con los años fuimos aprendiendo qué significaban esas palabras, o bien entendimos que “El palito de abollar ideologías” tenía relación, con muchos acontecimientos que han venido sucediendo en América Latina bajo el nombre “represión”.
Es importante recordar que Mafalda, creación de Joaquín Lavado (Quino), fue publicada por primera vez en 1964, durante el Gobierno de Arturo Illía en Argentina. Desde entonces, Mafalda ha sido famosa en la región latinoamericana por haber sembrado la duda en lo que respecta a la función del garrote policial.
Analizando la historia de la lucha de clases en el mundo, podemos comprobar que ese palito de abollar ideologías que Mafalda señalaba colgando del cinturón del policía, tiene su origen en los años de dictadura y represión estatal en la Argentina y en regiones vecinas que atravesaron situaciones iguales o similares en algún momento posterior. Podemos decir que esta imagen se aplica con más frecuencia y con más dureza, en la medida en que se agravan las condiciones de vida de las y los trabajadores. Para decirlo fácil: a más ajuste son necesarios más palos.
Paredes vacías, censura popular.
Censurar las expresiones artísticas urbanas es una estrategia política que desde hace años se implementa. Acontecen estas cosas en muchas partes del mundo; sin embargo, en esta ocasión limitaremos el espacio a América Latina.
La imagen anterior, es el retrato de Julieth Ramírez, una joven de 18 años asesinada por la policía nacional de Colombia el pasado 9 de septiembre del año 2020. Los habitantes de la ciudad de Bogotá se encontraban en un estado de furor y decepción frente a los abusos policiales que habían ocurrido recientemente y que, infelizmente concluyeron en la muerte de Javier Ordoñez, un abogado, padre y ciudadano. Ante tal acto, los y las bogotanas salieron a las calles, rechazando este acto de brutalidad policial y abuso de autoridad, furiosos y en acto simbólico, incendiaron los denominados CAI (Comando de atención inmediata), que son estaciones policiales. (Cabe resaltar que estos CAI, son establecimientos en los que los policías cometen delitos como maltratar a jóvenes y en casos violar niñas y/o mujeres. Pero no nos centraremos en estos actos).
La policía esta noche fue brutal, iniciaron a disparar con sus armas a diestra y siniestra, sin discriminar. Una de las balas perforó el pecho de Julieth, murió instantáneamente; esa misma noche murieron entre 12 y 13 personas (Incluida ella) y los 75 heridos por arma de fuego hicieron de esa, una de las más violentas de la capital en mucho tiempo.
Los habitantes, al día siguiente, convocaron un ¨canelazo¨ en el Cai, se hicieron muestras de poesía y lo que antes era un Cai, se transformó en una biblioteca popular, La biblioteca Popular Julieth Ramírez. El día después de la inauguración, miembros de la policía se dirigieron al Cai, y la imagen retratada de Julieth fue censurada, con pintura verde militar oscura, apagaron sus ojos y su boca. Fue el primer acto que esta institución realizó sin siquiera asumir la responsabilidad de la muerte de Julieth, ni de ninguna de las otras 12 personas asesinadas esa noche.
Latinoamérica protesta...
De Colombia nos trasladamos a Honduras. En Tegucigalpa, su capital, fue pintado un grafiti el 13 de agosto de 2020. ¨¿Dónde está el dinero? Honduras lo exige¨, campaña del consejo nacional anticorrupción.
La pandemia ha afectado la economía mundial. Esta vez en Honduras, se compraron insumos para la atención de pacientes y la detección del virus. Sin embargo, las y los ciudadanos comenzaron a darse cuenta de que la cantidad invertida no se reflejaba en la logística que el país estaba llevando a cabo; equipamiento médico que no funcionaba y errores en las pruebas de detección fueron algunos de los motivos para que el pueblo saliera a las calles para exigir respuestas sobre el dinero invertido y rechazar la corrupción del gobierno Hondureño.
Después de ver este graffiti, algunos policías llegaron en la noche e intentaron ocultar la manifestación con fuego y hasta tierra. Indignadas las personas, salieron nuevamente a las calles y en respuesta a la pregunta y a la censura respondieron primeramente pintando sobre lo que quisieron borrar ¨JOH se lo robó ̈ (Resaltamos en esta parte que el presidente del país se llama Juan Orlando Hernández y que su hermano ha sido culpable de narcotráfico). En segundo lugar, se multiplicaron los graffiti en el país con la pregunta del graffiti inicial ̈Dónde está el dinero? Honduras lo exige¨ en paredes y calles.
La expresión opresiva y la censura en los tiempos:
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| Referencia: https://conlaa.com/justicia-debora-arango/ |
Digna de una versión alternativa a la caricatura de Mafalda, la obra de Débora Arango muestra de forma explícita la opresión oficial frente a un ente femenino. Arango (1907-2005) fue una artista y acuarelista colombiana que se desarrolló en la corriente del expresionismo, abordando en sus temáticas la crítica social y política, además de revolucionar en su trabajo, ser la primera pintora colombiana en pintar desnudos femeninos. Asimismo, en 1944 se unió a un grupo de artistas donde a través de su muralismo, presentan su “Manifiesto de los Independientes” que consiste en el fortalecimiento del Arte Público.
En el mismo año, data la pintura presentada “Justicia”; una crítica abierta frente al patriarcado y al abuso del poder. Tres hombres oscuros, de aspecto policiaco o militar rodean a la mujer retratada con colores fuertes y claros en el centro de la composición. Con ellos, vemos que no estamos ajenos a este tipo de práctica por varias décadas y cómo varios integrantes de la fuerza pública cometen un sin fin de abusos contra la población civil, especialmente si se trata de reclamar por derechos. Los bolillos, como símbolo banal y supresor del patriarcado muestran el absurdo poder de muchos militantes, dando continuidad a prácticas que atentan, no sólo contra la integridad femenina, sino con los niños, estudiantes, ancianos, sin distinción de edad, sexo, condición social y demás, con un solo fin… Velar por sus derechos humanos.
La realidad de 1944 a la actual es un espejo, cuya diferencia está en la actualidad con el desarrollo de políticas globales en torno a los derechos humanos frente a dichas épocas, donde por entonces se venía de dos guerras mundiales y la gestación de las violencias nacionales (El Bogotazo, Movimiento FARC, M 19, ELN, Cartel de Medellín...) declaradas en contra del Estado, responsable de acontecimientos prevenibles, todo por una afán de poder concentrado a costa de las víctimas sociales (Campesinos, Docentes, Habitantes de Calle, Niños Abandonados, Desempleados…
Hoy, Colombia junta se revela en contra de estas prácticas estatales, que tristemente aún se encuentran a la orden del día; la invitación es a no ser indiferentes con la política de nuestros países, especialmente latinoamericanos, que la debatamos, deliberemos y sobre todo, que la exijamos para un bien común... porque como dice Jorge Eliecer Gaitan “El Pueblo es superior a sus Dirigentes”.
Por Grupo Sanmajão.
A Mafalda ensinou-nos muitas coisas, mostrou-nos algumas palavras que não conhecíamos: ideologia, censura, despotismo. Ao longo dos anos aprendemos o que essas palavras significavam, ou então entendemos que “The stick to dent ideologies” estava relacionada a muitos eventos que vêm acontecendo na América Latina sob o nome de “repressão”.
É importante relembrar que Mafalda, criação de Joaquín Lavado (Quino), foi publicada pela primeira vez em 1964, durante o Governo de Arturo Illía na Argentina. Desde então, Mafalda tornou-se conhecida na região latino-americana por ter posto em evidência o papel do clube policial.
Analisando a história da luta de classes no mundo, podemos verificar que esse pau de dentear as ideologias que Mafalda apontava penduradas no cinto do policial, tem sua origem nos anos de ditadura e repressão estatal na Argentina e nas regiões vizinhas por onde passou. situações iguais ou semelhantes em algum momento posterior. Podemos dizer que essa imagem é aplicada com mais frequência e severidade, na medida em que as condições de vida dos trabalhadores são agravadas. Para simplificar: quanto mais ajuste, mais paus são necessários.
Paredes vazias, censura popular.
Censurar as expressões artísticas urbanas é uma estratégia política implantada há anos. Essas coisas acontecem em muitas partes do mundo; entretanto, desta vez limitaremos o espaço à América Latina.
A imagem anterior é o retrato de Julieth Ramírez, uma garota de 18 anos assassinada pela polícia nacional colombiana em 9 de setembro de 2020. Os habitantes da cidade de Bogotá estavam em um estado de fúria e decepção diante dos recentes abusos policiais que infelizmente culminaram na morte de Javier Ordoñez, advogado, pai e cidadão. Diante de tal ato, os cidadãos de Bogotá saíram às ruas, repudiando esse ato de brutalidade policial e abuso de autoridade, furiosos e em ato simbólico, atearam fogo aos chamados CAI (Comando de Atenção Imediata), que são estações policiais. (Deve-se notar que esses CAIs são estabelecimentos nos quais a polícia comete crimes como maltratar jovens e, em casos, estuprar meninas e / ou mulheres. Mas não vamos nos concentrar nesses atos).
A polícia esta noite foi brutal, eles começaram a atirar com suas armas a torto e a direito, sem discriminação. Uma das balas perfurou o peito de Julieth, ela morreu instantaneamente; Naquela mesma noite morreram entre 12 e 13 pessoas (incluindo ela) e os 75 feridos por armas de fogo fizeram deste um dos mais violentos em muito tempo na capital.
No dia seguinte, os moradores chamaram de ¨canelazo¨ no Cai, amostras de poesia foram feitas e o que antes era um Cai, foi transformado em uma biblioteca popular, a Biblioteca Popular Julieth Ramírez. No dia seguinte à inauguração, policiais se dirigiram ao Cai, e a imagem retratada de Julieth foi censurada, com tinta verde militar escura, ofuscaram seus olhos e sua boca. Foi o primeiro ato que esta instituição realizou sem sequer assumir a responsabilidade pela morte de Julieth, ou de qualquer uma das outras 12 pessoas mortas naquela noite.
Protestos da América Latina ...
Da Colômbia nos mudamos para Honduras. Em Tegucigalpa, sua capital, foi feito um grafite no dia 13 de agosto de 2020. ¨Onde está o dinheiro? Honduras exige ”, campanha do conselho nacional anticorrupção.
A pandemia afetou a economia mundial. Desta vez, em Honduras, foram comprados suprimentos para atendimento ao paciente e detecção de vírus. No entanto, os cidadãos começaram a perceber que o valor investido não se refletia na logística que o país estava realizando; Equipamentos médicos que não funcionaram e erros nos testes de detecção foram alguns dos motivos que levaram as pessoas às ruas para exigir respostas sobre o dinheiro investido e para rejeitar a corrupção do governo hondurenho.
Depois de ver este grafite, alguns policiais chegaram à noite e tentaram esconder a manifestação com fogo e até sujeira. Indignado, o povo saiu às ruas novamente e em resposta à pergunta e à censura, eles primeiro responderam pintando sobre o que queriam apagar ¨JOH roubou-o ̈ (destacamos nesta parte que o nome do presidente do país é Juan Orlando Hernández e que seu irmão é culpado de tráfico de drogas). Em segundo lugar, o grafite se multiplicou no país com a pergunta inicial do grafite: Onde está o dinheiro? Honduras exige isso ”em paredes e ruas.
A expressão opressora e a censura na época:
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| Referencia: https://conlaa.com/justicia-debora-arango/ |
Digno de uma versão alternativa ao cartoon Mafalda, a obra de Débora Arango mostra explicitamente a opressão oficial contra uma entidade feminina. Arango (1907-2005) foi uma artista e aquarelista colombiana que se desenvolveu na corrente do expressionismo, abordando a crítica social e política em seus temas, além de revolucionar seu trabalho, sendo a primeira pintora colombiana a pintar nus femininos. Da mesma forma, em 1944 juntou-se a um grupo de artistas onde, através do seu muralismo, apresentam o seu "Manifesto dos Independentes" que consiste no reforço da Arte Pública.
No mesmo ano, o quadro apresentava datas "Justiça"; uma crítica aberta ao patriarcado e ao abuso de poder. Três homens morenos, de aparência policial ou militar, cercam a retratada com cores fortes e claras no centro da composição. Com eles, vemos que não somos alheios a esse tipo de prática há várias décadas e como diversos integrantes da força pública cometem incontáveis abusos contra a população civil, principalmente no que se refere à reivindicação de direitos. As bobinas, como símbolo banal e supressor do patriarcado, mostram o poder absurdo de muitos militantes, dando continuidade a práticas que ameaçam, não só contra a integridade feminina, mas também contra crianças, estudantes, idosos, sem distinção de idade, sexo, social condição e outros, com um único propósito ... Zelar pelos seus direitos humanos.
A realidade de 1944 até o presente é um espelho, cuja diferença está atualmente com o desenvolvimento de políticas globais em torno dos direitos humanos em comparação com aqueles tempos, onde naquela época havia duas guerras mundiais e a gestação da violência nacional (El Bogotazo, Movimiento FARC , M 19, ELN, Cartel de Medellín ...) declararam-se contra o Estado, responsável por fatos evitáveis, tudo devido a um desejo concentrado de poder em detrimento das vítimas sociais (Camponeses, Professores, Habitantes de Rua, Crianças Abandonadas, Desempregados. ..
Hoje, juntos, a Colômbia se revela contra essas práticas estatais, que infelizmente ainda estão na ordem do dia; O convite não é para ser indiferente à política dos nossos países, especialmente latino-americanos, de que debatamos, deliberamos e sobretudo, que o exijamos para um bem comum ... porque como diz Jorge Eliecer Gaitan “O Povo é superior a seus líderes ”.
Pelo Grupo Sanmajão.
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